Agosto trajo consigo nostalgia para el pueblo de Jardín, esto ante el descenso de una las campanas de la Basílica Menor La Inmaculada Concepción. La historia y el sentimiento que, desde hace 102 años, representan estos instrumentos para el municipio, invitan a los jardineños residentes en el municipio y fuera de él a unirse para reemplazarla.